
Hospital Rush es el típico juego al que no me pude resistir cuando lo vi a buen precio, porque me evocó recuerdos inolvidables… Personalmente me hizo pensar en el Theme Hospital para PC, con el que he disfrutado varias veces y del que nunca me canso.
Ambos juegos tienen como temática los hospitales, pero cuando lees las instrucciones, te das cuenta de que ahí acaban todas las similitudes. Los que habéis jugado al PC recordareis que en el Theme Hospital había que llevar la gestión completa del hospital: desde la contratación de los trabajadores hasta la investigación de nuevos medicamentos, pasando por la gestión de las habitaciones y recursos del centro. La verdad es que esperar lo mismo en un juego de mesa sería demasiado ambicioso, y si se pudiera conseguir, supongo que el juego sería lo suficientemente farragoso en cuanto a la preparación y gestión de los turnos que echaría para atrás.

En Hospital Rush cada uno de los jugadores desempeña el papel de un interno (creo que ese es el término profesional) que desea ser contratado por el hospital. Para ello, debe ser el primero en alcanzar 10 puntos de reputación dentro del centro. Estos puntos se consiguen curando enfermos, estudiando mucho y realizando algunas trampas que otras, aunque también podemos conseguir puntos chivándonos de las trampas realizadas por otros jugadores… La confrontación está servida!

Las reglas son bastante sencillas de entender, y quitando el texto de personalización de cada uno de los siete personajes que te pueden llegar a tocar, el resto del desarrollo del juego está perfectamente explicado a través de los dibujos del tablero, no dejando lugar a ninguna duda.
Nada más sacarlo a la mesa puse sobre aviso a mis peques de que el Hospital Rush es juego muy competitivo, y que “fastidiar” al resto de jugadores es una de las formas de ganarlo. Cada uno de los personajes que tocan al azar tiene una serie de características que les permiten hacer “maldades” al resto de jugadores para conseguir ventaja sobre éstos. A mis peques no les puedo decir que en realidad se llaman putadas, porque suena feo, pero en realidad eso es lo que son: robar pacientes, dinero o medicinas, traficar con medicamentos, echar pacientes del hospital… vamos, todo un conjunto de acciones que pueden desbaratar cualquier estrategia por muy bien montada que esté y que te llegan a dar una ventaja muy golosa sobre el resto de jugadores.

Aún con la advertencia hecha. y siendo yo la primera que comencé a hacer maldades (voy a usar este término, que me da palo escribir palabras malsonantes), el mosqueo estaba servido. Lo único que les calmaba un poco los ánimos era la posibilidad de poder “chivarse” del que ha hecho la maldad. Poco a poco, partida tras partida, los niveles de mosqueo han ido descendiendo y han ido aumentando las ganas de “venganza”. Además, se han dado cuenta de que el último jugador puede hacer una maldad por turno sin que nadie tenga la posibilidad de chivarse, por lo que la típica pelea de “yo quiero ser el primero!” ha sido sustituida por “déjame a mí el último puesto!”.
La duración de las partidas es bastante corta: en una media hora se puede jugar, siempre que los participantes no se tiren dos horas pensando qué van a hacer, por supuesto. Esto además supone la ventaja de que con los ánimos caldeados siempre quedan ganas de echar varias partidas seguidas.
Al ser un juego bastante rápido, a mis peques les cuesta mucho organizarse para ganar, porque ellos son más de estrategias a largo plazo y no acaban de pillarle el tranquillo a eso de ganar en unos ocho o nueve turnos. Por ahora he ganado yo todas las partidas, que me viene muy bien para subir la moral, porque llevo una rachita de derrotas que para qué os voy a contar, pero poco a poco voy ganando con menos holgura… creo que ya les queda poco para que las partidas sean bastante reñidas.
La única pega que le encuentro al Hospital Rush es que el número mínimo de jugadores es tres. He estado pensando cómo jugarlo a dos, pero la única forma que se me ocurre es eliminar las maldades, y entonces pierde toda la gracia.
Por lo demás, lo considero un juego bastante divertido para esas tardes en las que se te echa el tiempo encima y apenas tienes tiempo para jugar. Además, la preparación es mínima: colocar el tablero, repartir los personajes al azar y poco más.
¿Os gusta esta temática tanto como a mí? ¿Habéis probado el juego? Dejad vuestros comentarios más abajo.
Vídeos de Hospital Rush
Aquí os dejo un vídeo que hemos hecho de los componentes de este divertido juego!
Fotos de Hospital Rush
Dejad las fotos de vuestras partidas o, si os entra la vena artística…
1 comentario en «Hospital Rush. 7 y 10 años. 3 jugadores.»