
Y continuamos estrenando los juegos que hemos adquirido en el mercadillo solidario de Queremos Jugar. Esta vez le toca el turno a una adquisición de mi peque mayor: The adventurers: el templo de Chac.
Reconozco que es de los tipos de juegos que veo y dejo pasar de largo, porque no me llama nada la atención, pero a mi peque le encantó la caja, el tipo de juego y ¡el precio!
Ambientación del The adventurers
Cada jugador toma el papel de un aventurero buscador de tesoros que se adentra en el corazón de la selva de Guatemala para explorar el tempo del antiguo Dios maya Chac. Sólo aquel que logre cruzar el templo llevando consigo el mayor número de tesoros alcanzará la fama y la gloria.
El tempo está repleto de tesoros de valor incalculable, pero todos ellos protegidos por trampas y peligros mortales. Cuanta más carga lleven nuestros exploradores, más lento podrán avanzar debido al peso que les supone cargar con todos los tesoros… deberás decidir si merece la pena arriesgar la vida y caer en la codicia o continuar adelante a pesar de no llevarte consigo tantos tesoros.
Este Templo está dedicado a Chac, el antiguo dios maya de la lluvia y la tormenta. En una de las zonas de más difícil acceso al templo existe una talla circular de incalculable valor que le representa; colocada justo frente a la ruidosa cascada, a buen seguro debió impresionar a sus devotos seguidores.
El Dios Chaac en la mitología Maya

Se trataba de uno de los dioses más importantes de todas las deidades mayas.
Chaac, por un lado, es fuego al desdoblarse en rayo o relámpago, y fue uno de los apelativos que más emplearon los gobernantes mayas. Por otro lado, es agua o lluvia, que por lo general y en especial en el norte, se entiende como principio generador de vida, aunque los historiadores afirman que Chaac poseía también los aspectos negativos de la lluvia encarnados en diluvio, inundaciones e incluso huracanes.
Hoy en día en varias poblaciones Mayas aun se le rinde culto al dios. Por lo general una vez al año se hace una ceremonia denominada “Ceremonia de la abundanza”, en los meses de Marzo a Mayo, con el objetivo de pedir las lluvias para acabar con la sequía. La ceremonia consiste en llevar ofrendas a un altar, entre las que están gallinas, masa, granos de maíz y Balche (licor maya), con la cual se genera comida como Cool (caldo de pollo con verduras y masa), que es ofrecida al dios.
Posteriormente el J Men o sacerdote maya empieza a orar en maya, para posteriormente consumir los alimentos. En estas ceremonias participan todo el pueblo.
Puesta en escena

La puesta en escena puede ser algo liosa en las primeras partidas, pero a medida que le cogemos el tranquillo al juego, con una buena organización de los componentes no es tan larga.
Lo primero será colocar los peligros evidentes a lo largo del tablero central: la roca, los muros del pasillo de entrada y el puente sobre el abismo con sus tablones.
Posteriormente se rellenará la sala de lava con 14 fichas de jeroglífico, con los jeroglíficos hacia arriba, las dos fichas de sol en las esquinas, y se cubrirá todo con la carga grande de ocultación. La disposición de las fichas no será visible hasta que un aventurero descubra esta sala durante la partida. Se tomarán cuatro jeroglíficos marrones al azar de los 14 que hay y se colocarán junto a la casilla inicial de la roca con el jeroglífico hacia abajo.
Se ha de barajar el mazo de cartas de muro y se colocará junto a la sala de muros, con espacio suficiente a su izquierda como para colocar tres cartas. Se pueden utilizar las flechas del borde del tablero para calcular el espacio que se necesita para su colocación.
Una vez que ya tenemos colocados todos los peligros mortales (o casi) que oculta el tempo, pasaremos a colocar los tesoros que ofrece:
Se barajan los seis mazo de tesoros existentes y se van colocando cada uno en su zona correspondiente:
- cuatro mazos de tesoro junto a la sala de los muros (reverso de la carta en marrón).
- un mazo de tesoro junto a la sala de lava (reverso de la carta en rojo)
- un mazo de tesoro junto al río (reverso de la carta azul)
- cuatro cartas de tesoro de hornacina de valor cuatro junto a las casillas de hornacina, cerca de la sala de lava. Se colocarán bocarriba porque son todos iguales.
- la carta de hornacina de valor 6 se colocará en el otro extremo de la cascada.

Y ahora toca decidir con qué personaje se adentrará en el templo cada uno de los jugadores. Para ello, se barajarán las 12 cartas de aventureros y se repartirán dos a cada jugador de forma aleatoria. Los jugadores cogen las dos figuras correspondientes y deciden con cual de los dos personajes entrarán de primeras en el templo, colocando la figura en la entrada del mismo.
El jugador inicial será el jugador más experto… por ende, el más mayor… ¡que forma más bonita de decir que el más viejo comienza la partida!
Mecánica del juego
Cada turno se compone de seis sencillas fases:
Fase 1. Ajustar el nivel de carga.
Cada jugador cuenta el número de tesoros que lleva consigo y determina su nivel de carga a partir de la carta de ayuda de personaje recibida.
Fase 2. Lanzar los dados y determinar el número de acciones
Cuando se lancen los dados, cada jugador podrá realizar tantas acciones como valores de los dados se hayan obtenido iguales o superiores a su nivel de carga.
Fase 3. Realizar acciones.
Cada aventurero realizará el número de acciones que le permita la tirada y su nivel de carga.
En el apéndice de las instrucciones del juego, existe un resumen fantástico de las acciones que puede llegar a realizar cada uno de nuestros aventureros en las distintas zonas del templo.

Fase 4. Mover los muros y la roca.
Cuando todos los jugadores hayan realizado sus acciones, se sacarán tres cartas de muro, que indicarán si el corredor se estrecha o no. Posteriormente, se tirarán los dados para determinar el avance de la roca. Pro cada valor obtenido en la tirada igual o mayor a tres, la roca avanzará una casilla.
Para que los aventureros tengan un poco de ventaja, en la primera ronda solo se tira un dado para el movimiento de la roca, en la segunda dos, en la tercera tres y así sucesivamente hasta que en la quinta y a partir de ésta, se tirarán todos los dados para el avance de la roca.

Fase 5. Hacer entrar reemplazos.
Si alguno de los aventureros ha muerto “accidentalmente” a causa de alguna de las trampas existentes en el templo, en este momento puede ser reemplazado por su aventurero amigo. Para hacerlo, al menos una de las casillas de Sol de la Sala de la Lava debe estar abierta tras el paso de la roca por el corredor que rodea la Sala de la Lava.
Si ninguna de las losetas de Sol está abierta, el jugador ha de esperar a que se abran antes de seguir jugando con su segundo aventurero.

Fase 6. Pasar los dados a la izquierda
El Guardadados (jugador que va de mano) pasa los dados al jugador sentado a su izquierda; éste se convierte en el nuevo Guardadados y en primer jugador de la siguiente ronda.
Aspecto visual
El aspecto visual de The Adventurers es inmejorable una vez puesto en mesa. Tiene toda la pinta de esas películas de Indiana Jones que veíamos de peques, con su bola rodante y todo.
Pienso que una de las cosas que más han influido en el éxito que ha tenido en mi casa este juego es esa sensación de “estar dentro” del juego. Muy temático visualmente, consigue con gran facilidad que te metas dentro de la partida.
Experiencia Personal

Pues esta es la parte peliaguda de la partida.
Aquí tenemos opiniones encontradas en mi casa: a los peques por una parte es un juego que les encanta. Además, como las partidas son relativamente cortas, siempre quieren encadenar una tras otra.
Por otra parte, a mí es un juego que sinceramente me acaba aburriendo. Ya he encontrado la forma de pasárselo sin ni siquiera perder a un explorador (hombre, siempre se puede dar un chungo total y morir en el intento) y ser la primera que sale del templo cargada de tesoros.
Pero todo es cuestión de retos: en una partida puedes ponerte el reto de conseguir el tesoro del puente, en otra, pasar sobre la lava… y de esa forma algo menos monótono se me hace…
Terminando

En resumen: es un juego divertido en adultos para una partida de vez en cuando, y para los peques es un no parar de querer jugar y jugar y jugar.
Lo bueno es que como es sencillo, pueden jugar ellos solos sin necesidad de un adulto supervisando todo el rato la partida.
Y eso sí, ¡temático como el solo y con un aspecto en mesa difícilmente superable! Bueno, miento, acabo de ver una versión de las figuras de los aventureros pintadas y eso sí que queda totalmente espectacular! Os dejo la imagen que he copiado de la página de la tienda Zacatrús.

¿Vosotros habéis jugado? ¿Qué os ha parecido? ¡Dejad vuestro comentario y compartidlo con nosotros!