
Nuevamente hemos estado jugando una partida a este divertido juego de robots mi peque mayor y yo: el Steam Park.
Las partidas a dos jugadores son bastante rápidas, en unos cuarenta minutos hemos terminado. En cuanto a las tarjetas de turno, hemos utilizado la del primer y la del segundo turno, en vez de utilizar la del primer turno y la del “dormilón”, que es la que esté penalizada con dos basuras adicionales al principio de turno. Es algo que le gusta mucho a mi hija porque le permite centrarse en otros aspectos del juego y no estar tan pendiente de la retirada de basuras, ya que yo suelo ser más rápida que ella colocando los datos y normalmente le tocaría a ella salir la última.
Esta vez he intentado prestar más atención a mis basuras, e incluso me he comprado una tienda de tipo “aseo” desde el principio de la partida…. pero no hay manera, al final he acabado con un montón de basuras, me han penalizado con un montón de diyares (la moneda del juego) y he perdido; y decir que he perdido es decir poco… he perdido estrepitosamente contra mi peque y por más de 40 puntos de diferencia, lo cual no es poco precisamente.

Resulta un poco frustrante que siempre me gane mi hija, pero hay que seguir intentándolo, además de que ella se lo pasa bomba, sube su autoestima y siempre quiere repetir! (elemento fundamental para poder seguir jugando con ellos e inculcándoles el gusto por los juegos de mesa).
Por supuesto, y como viene siendo habitual en nuestras partidas a este juego, ha llegado Godzilla al final de la partida y ha causado la destrucción total de ambos parques, creando el caos!! 😛
Hasta la próxima!